Bogotá D. C., 04 de junio de 2025.

Por Jessica Cedeño - Oficina Asesora de Comunicaciones CVP

“Muy contentos porque las niñas, niños y la comunidad en general del barrio María Cano se han venido apropiando del mobiliario, la huerta urbana que entregamos en el parque; más de 6 barrios vienen a disfrutar de este lugar y para nosotros es fundamental fomentar la apropiación y respeto por este espacio público de calidad que entregamos. Vamos a seguir trabajando desde los más pequeños hasta los más grandes, para que aprendan a querer y cuidar su parque”, dijo Juan Carlos Fernández, director general de la Caja de la Vivienda Popular.

Esta iniciativa se desarrolló en conjunto con la Secretaría Distrital de Ambiente y la Junta de Acción Comunal del barrio María Cano. Durante el espacio se realizaron actividades educativas y participativas como: recorridos de observación, jornadas de limpieza y patrullas de vigilancia ambiental. Durante el espacio, los pequeños expresaron a través de murales colectivos qué significa el parque para ellos, identificaron aspectos importantes del lugar, como el estado de la basura, las zonas verdes y los juegos en el recorrido “Detectives del parque”. Además, realizaron labores de limpieza y crearon carteles con mensajes para el cuidado del parque en la actividad “Manos al parque”.

Gracias a este trabajo, los pequeños se convirtieron en verdaderos guardianes del Parque; ahora su tarea es la de promover la apropiación social, el amor, fortalecer el sentido de pertenencia, la conciencia ambiental y el respeto por su parque.

“Los niños deben apersonarse del espacio, deben querer su parque y cuidarlo, para mí son importantísimas estas actividades porque refrescan la memoria de las nuevas generaciones de que estos espacios son su medioambiente, su entorno donde van a vivir y jugar las futuras generaciones”, dijo Claudia Beltrán, habitante barrio María Cano.

En este espacio, lo que más les llamó la atención a las niñas y niños fue la actividad denominada “Patrullas Guardianas: vigilantes del buen uso”, actividad donde los niños se organizaron en grupos con roles específicos: observadores, cuidadores de mascotas y recicladores. Esos roles los deberán mantener por una semana, para que adelanten una vigilancia activa que promueva buenas prácticas en el parque, mostrando un ejemplo admirable de participación comunitaria.

Finalmente, cada niña y niño que participó en esta actividad recibió un reconocimiento por su compromiso con el parque María Cano, por ser los verdaderos protagonistas.

“Para la Caja de la Vivienda Popular es fundamental liderar procesos con las y los niños de los territorios donde adelantamos proyectos integrales. Por eso, a través de una ceremonia de clausura queremos reconocer el esfuerzo y compromiso de los niños del barrio María Cano, este es un momento emotivo porque nos da alegría entregar estos certificados y medallas a cada “Guardián del Parque María Cano; además, resaltamos y destacamos la participación de las familias, de los nombrados padrinos de estos jóvenes protectores del espacio público”. Afirmó María Ángela Baracaldo, directora de Mejoramiento de Barrios.

Este proceso no solo reforzó el amor y respeto por el Parque, sino que también impulsó una cultura de cuidado ambiental y convivencia pacífica en el barrio. La CVP reafirma así su misión de promover la participación activa de la comunidad, el sentido de pertenencia, la conciencia ambiental en los niños y niñas del barrio y usuarios del Parque María Cano, reconociéndoles como agentes de cambio y protectores del parque. El objetivo de la CVP también es mantener los espacios públicos como lugares seguros y acogedores para todos.

“Es importante para nosotros como comunidad que se apropien de los lugares, que se apropien de los espacios que la Caja de la Vivienda Popular ha creado para nosotros”, dijo Luis Eduardo Salguero, líder JAC barrio María Cano.

El propósito es también extender la invitación a familias y vecinos para que ellos generen un impacto comunitario de respeto y apropiación por su parque. 

¡Gracias a las niñas, niños, familias y vecinos que hicieron de esta iniciativa un ejemplo de amor por el espacio público y el medio ambiente!

 Conoce más sobre la transformación del Parque María Cano: https://youtu.be/Lfp0Mohc8ek?feature=shared

 Intervención integral del parque María Cano: https://www.cajaviviendapopular.gov.co/?q=Noticias/parque-mar%C3%ADa-cano-un-espacio-p%C3%BAblico-renovado-para-el-bienestar-de-la-comunidad-en-ciudad

 Historias de cambio en el barrio María Cano: https://www.cajaviviendapopular.gov.co/?q=Noticias/la-caja-de-la-vivienda-popular-les-transform%C3%B3-la-vida-los-habitantes-del-barrio-mar%C3%ADa-cano

Seguimos trabajando por y en el Parque María Cano

Antecedentes:

En octubre del año 2024, la CVP, en cabeza de su director general Juan Carlos Fernández Andrade, hizo la entrega de las obras de infraestructura y adecuación del Parque María Cano, y de las vías circundantes a la comunidad de los barrios María Cano, Las Huertas y los sectores vecinos de Ciudad Bolívar.

La inversión total fue de $ 4.498.244.141, de los cuales $ 4.020.902.722 corresponden al contrato de obra y $ 477.321.419 al contrato de interventoría. Este proyecto beneficia directamente a 3.140 personas e indirectamente a otras 2.585 en los barrios María Cano y Las Huertas. Esto fue posible gracias a la participación comunitaria en las etapas de diseño y planificación.

El proyecto representa un paso fundamental en la recuperación y la revitalización de 5.122,28 m² de espacio público en Bogotá, optimizando zonas para el uso y disfrute de la comunidad. La intervención incluyó la pavimentación de cinco segmentos viales, construcción de andenes y mejoras de accesibilidad, diseñados para la movilidad y la seguridad de los habitantes de la zona. En el Parque María Cano se han implementado áreas recreativas y de esparcimiento con infraestructura inclusiva para todas las edades, incluyendo zonas de juegos infantiles, gimnasio biosaludable, espacios para mascotas y un área destinada a la práctica de skate y patinaje.

El Parque, con su proceso de diseño participativo, ha integrado las necesidades de los habitantes con un enfoque de género y diferencial para hacer del espacio un lugar más seguro y acogedor para todos, especialmente para las mujeres y las personas mayores.